Si está pensando en la creación de uno o varios vestidores en su hogar, lo más probable es que el primer dilema al que se enfrente es: ¿vestidores abiertos o cerrados?
Claro, no hay una opción que sea preferible sobre la otra en todas las situaciones. Más bien, cada una cuenta con sus pros y contras y por ello debe elegir las que más le convengan a usted.
Hoy traemos un listado con las cosas más importantes a tener en cuenta a la hora de hacer la elección.
Ventajas y desventajas de los vestidores abiertos y cerrados
Ante todo, los vestidores abiertos son los que más vemos en revistas de decoración o incluso series y películas. Pero, ¿son realmente prácticos?
Por un lado, en el día a día es sencillo acceder a todo su contenido sin perder tiempo. Debido a que visualmente es más fácil identificar dónde se ubica cada prenda, se ahorra tiempo al planificar, escoger y recoger las prendas de ropa. Además, le dan un toque estético muy favorecedor a la estancia ya que los espacios parecen más amplios y luminosos.
No obstante, requiere mucho orden y limpieza para que mantenerlo en el día a día no se convierta en un dolor de cabeza.
¿Qué decir de los vestidores cerrados? Hay dos formas de lograr el resultado: con puertas y con cajones.
La parte buena es que la ropa y los zapatos quedan libres de polvo. Igualmente, la habitación siempre parecerá recogida incluso si ese orden no se refleja en su interior.
Sin embargo, puede ofrecer una imagen de espacio más cerrado o simple. Algo que puede solucionarse con iluminación integrada en los armarios y detalles decorativos en las puertas de los armarios.
Por ejemplo, pueden combinarse puertas de vidrio o con molduras, en distintos acabados, etc. También son personalizables los tiradores, que dan un aspecto sofisticado y único.
Para tener más ideas puede consultar los proyectos de vestidores que ya hemos realizado, donde encontrará diferentes tipos. Pero si desea un proyecto a su medida, le animamos a contactar con Armarios Closed sin compromiso.